1.No tomar suficientes legumbres y frutas.
Son alimentos ricos en antioxidantes, vitaminas, minerales y fibra alimentaria.Recuerda la regla de 5 piezas al día en frutas e intenta tomar un par de platos de legumbres por semana.
2.Eliminar las grasas
Son esenciales para la vida e imprescindibles en el deporte, aunque su contenido calórico sea elevado , ¡ no las elimines! Te protegen de infecciones y son el combustible que necesitas en tus sesiones aeróbicas.La gran mayoría deben ser insaturadas.
3.Desayunar poco
El proceso de catabolismo que sufres por la noche lo detiene el desayuno , que reactive tu metabolismo. Aporta carbohidratos , proteínas y algo de grasa sana, no sirve solo con un café.
4.Cenar copiosamente
Tendrás un sueño agitado con una digestión lenta y pesada.Además , al no ser consumida la energía aportada, es más fácil que se guarde como reserva.
5.No comer al acabar de entrenar
El ejercicio te pone en situación catabólica, de destrucción muscular y la toma de alimentos detiene este estado. Comiendo tendrás una recuperación rápida y pondrás a tu cuerpo en estado anabólico.
6.Comer en exceso antes del ejercicio
La sangre que demanda tu sistema digestivo y la energía que precisa el propio proceso es justo lo que necesitan tus músculo para moverse.