Acabas de apuntar al gimnasio pero no sabes cuál es el mejor momento para ejercitarte? Hoy en día es difícil poder escoger la hora para entrenar, ya que las obligaciones laborales o familiares determinarán en qué momento del día podremos trabajar la mente y la musculatura.
La mejor hora para entrenar es aquella en la que tenemos el tiempo suficiente para poder hacer un entrenamiento con cara y ojos y sin estar pendientes del reloj, es decir, sin el estrés que llevamos durante todo el día.
Científicamente se ha comprobado que el cuerpo evoluciona metabólicamente durante el día y es aconsejable conocer esta evolución para entrenar en el momento en que el cuerpo está mejor preparado para hacerlo.
Y el momento óptimo para entrenar es …
Por norma general, nuestro cuerpo se relaja durante la noche y aprovecha para regenerar los sistemas que están más agotados. Así pues, durante las primeras horas de la mañana no es aconsejable hacer ejercicios intensos, ya que haríamos pasar el cuerpo de un estado «reparador» en un estado de máxima actividad en pocos minutos.
A partir de media mañana, cuando ya hace unas horas que nos hemos levantado, que estamos en movimiento y que tenemos algo en el estómago, el cuerpo ya está preparado para aguantar un buen entrenamiento, sea de resistencia, fuerza o flexibilidad. Este estado óptimo para rendir al máximo nivel durará hasta media tarde. Es a partir de aquí que, debido al agotamiento físico y psíquico que acumulamos durante todo el día, nuestro cuerpo ya no aguanta los esfuerzos de la misma manera. Nuestros entrenamientos no serán tan eficientes, aunque todavía podremos rendir a un cierto nivel.
Es bueno hacer caso a las sensaciones que nos da el propio cuerpo
Por norma general, este es el comportamiento de nuestro cuerpo y, en consecuencia, las mejores horas para hacer un entrenamiento eficiente. Ahora bien, no todo el mundo tiene las mismas obligaciones durante el día ni tiene los mismos horarios. Así pues, la evolución de su metabolismo será ligeramente diferente al de la norma.Esto significa que es probable encontrar personas que rinden mucho mejor a media mañana que a media tarde, oa última hora de la tarde que a media mañana. Aquí es cuando entra el conocimiento que cada uno tiene de su propio cuerpo y de los hábitos adquiridos durante la vida para saber cuál es el mejor momento para rendir al máximo en un entrenamiento.
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