El ejercicio físico puede prevenir la aparición de demencia senil y enfermedad de Alzheimer conforme a tres estudios médicos presentados en la Conferencia Internacional de la Asociación de Alzheimer:
1.Estudio danés
Realizado con 200 personas con síntomas moderados de Alzheimer. Demostró que después de 16 semanas de ejercicio aeróbico, mejoraron los resultado sen los test de velocidad y atención mental en los participantes que habían entrenado al menos a un 70% des u frecuencia cardiaca máxima durante el 80% de cada sesión. También encontraron que tenían menos ansiedad,depresión e irritabilidad.
2.Estudio estadounidense de la Universidad Baptista Wake Forest
Participaron 65 adultos con deterioro cognitivo leve que eran sedentarios y que tuvieron que hacer ejercicio 45-60 minutos, 4 veces por semana, durante 6 meses. El grupo que hizo ejercicio aeróbico al 70% de su FC max. presentaba niveles más bajos de proteína ‘tau’ (marcador característico de la enfermedad de Alzheimer) en el líquido cerebroespinal que el grupo que hizo ejercicios de estiramientos al 35% de la FCmax, durante los 6 meses del estudio. El grupo aeróbico también mejoró el flujo sanguíneo en el cerebro en las zonas relacionadas con la memoria y el procesamiento de información y los resultados de los test que miden la respuesta ejecutora.
3.Estudio canadiense.
Incluyó a 71 participantes con deterioro cognitivo vascular leve que realizaron ejercicio aeróbico durante 6 meses por 3 días a la semana durante una hora. Al comparar los resultados antes de empezar y después con las pruebas ADAS-Cog de Alzheimer se comprobó que las 62 personas que acabaron los 6 meses de entrenamiento aeróbico habían mejorado su puntuación,especialmente en las pruebas de memoria y atención.
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